Alonso Gallardo militante comunista diciembre del 2022
Desde el inicio de ruptura del movimiento comunista internacional en los cincuenta, acrecentada con el fallecimiento de Stalin en el 1953 y sin negar ningún posible error, pero reafirmando su línea de trabajo autocrítica, se inicia un proceso revisionista concretado en el XX Congreso del PCUS de 1956, generando dos líneas antagónicas: una dogmática y mecanicista y la otra liberal y reformista, pero las dos revisionistas al nacer de los acuerdos del mismo congreso. Unos lo abrazan como un dogma donde todo tiene explicación desde el leninismo victorioso, los otros, por el triunfo del socialismo sobre el capitalismo. Los primeros por la superioridad económica y científicotécnica demostrada en la edificación socialista durante la etapa de Lenin y Stalin, la cual les habría llevado al comunismo y a la superación de la lucha de clases y los otros igual, pero desde la superación de la lucha de clases llegar a la colaboración entre clases, donde el propio desarrollo del capitalismo nos llevaría al socialismo como principio utópico. Pero, qué une hoy al honrado eurocomunista (el neoliberal lleva años en el PSOE) en las filas reformistas del PCE, Izquierda Unida, Podemos o el SUMAR de Yolanda Díaz, con los que les vilipendian con la afirmación y el maximalismo desde un marxismo leninismo mecanicista sectario: Que ninguno de los dos profundizó desde el marxismo en sus raíces comunes provenientes del XX Congreso del PCUS, donde cada uno abrazó una variante del revisionismo: unos la dogmática y mecanicista y otros la reformista y posmarxista. Veámoslo.
Como ejemplo este artículo del PCOE que podía ser del PCPE, PCTE, IC o de la línea "ortodoxa" de PCE, tocó esta por su simplicidad y ser pública:https://diario-octubre.com/2022/11/24/pcoe-los-logros-del-gobierno-progresista/. Lo inician con una afirmación, que confronta con todo análisis concreto de la realidad concreta del marxismo y con la critica al principio de clase contra clase de la Internacional Comunista, entre otros; "Cada vez resulta más difícil para un trabajador distinguir a un gobierno de 'izquierdas' y 'progresista' de un gobierno de la derecha más reaccionaria. Más allá del discurso y el maquillaje, el arco parlamentario, de 'izquierda' a 'derecha', representa unos mismos intereses, los intereses de los monopolios, del gran capital." Entre otros artículos publicados en "puntorojo", pongo este que abarca a asesores y especialistas laboralistas, situando las diferencias antagónicas con respecto a cualquier reforma laboral, legislada desde la transición de la dictadura franquista: La izquierda negacionista y la reforma laboral pero la frase transcrita, encierra tal suma de afirmaciones que no extraña que la clase obrera por ahorro de economía de esfuerzo no atienda. Negar mejoras en la reforma de pensiones, la laboral, el SMI o el avance social del enfoque de la crisis surgida de la pandemia, de la crisis global y la que provoca el apoyo a la guerra imperial de la OTAN en Ucrania y más, cuando los indicadores económicos, sociales de empleo marcan unas mejores condiciones que en el resto de Europa, para encima, igualarlo con las nefastas actuaciones de Zapatero y Rajoy ante la crisis que explotan en el 2008 y el 2011. Camaradas; no es un problema de ceguera, es por pérdida total de identidad y de empatía con tu clase y tu pueblo.
Leer solo lo que te interesa y reafirma de la prensa burguesa, dice mucho de los intereses de clase que motivan actuaciones como esta, similares a las del trotskismo y anarcoliberales en 1936, que más que utópicas eran quintacolumnistas. Aclarar el dato de 1,5 billones de deuda pública; que las medidas tomadas por Zapatero y Rajoy en el 2008 y 2011, fueron con reducción directa de salarios, pensiones, ayudas sociales, privatizaciones de empresas públicas, mejoras del despido y del cierre empresarial, por bajar impuestos a la banca, grandes fortunas o por subir las ayudas por rescate a la banca, multinacionales y grandes empresas. Entre otras muchas, este gobierno progresista pagó con fondos públicos, el salario a millones de trabajadores garantizando el mantenimiento de la empresa, desarrolló numerosas ayudas sociales más la subida del SMI y pensiones o perseguir a empresarios esclavistas, sin entrar, en la parte económica de la batalla contra el COVID 19. No ver esto en la crítica a los errores del gobierno, que los tuvo, no es por ceguera, es anteponer por dogmatismo y mecanicismo la mentalidad egocéntrica del burgués, por delante de la de pueblo.
Para acabar el punto decir, que ya antes del COVID 19, daba la tendencia alcista pero reduciéndose la ratio de la deuda pública sobre el PIB y que el último ejercicio del 2021 batió el récord, pese a un leve retroceso con respecto a 2020. Y todo esto con un gobierno en minoría recién formado, que lo primero que hace, es enfrentarse por primera vez a una pandemia en medio de una crisis global del sistema capitalista de libre mercado. Como anécdota de trasvase de dinero público; el astillero de Naval Gijón se creó en 1984 y se disolvió en el 2009. en esos veinticinco largos años de duración del astillero privado, se fundieron miles de millones de subvenciones públicas en el mantenimiento en función del astillero sin apenas producción o ninguna, empujados los poderes públicos por las movilizaciones de los trabajadores de la naval y huelgas locales y regionales. Es decir, el grueso de la financiación, regulaciones y prejubilaciones de empleo en Naval Gijón y muchas otras empresas en España, fueron financiadas públicamente hasta el abandono de la lucha o por desaparición de los combatientes. De hecho todavía hoy en la bahía de Gijón, los trabajadores de Naval Gijón bajo la cobertura de la CSI, están condicionando el Plan General Urbano a los acuerdos pactados del cierre definitivo del astillero. Todos ese dinero público fue gastado para ahogar la movilización obrera y los trabajadores cobrar un salario sino eran prejubilados, a nadie en Asturias ni en España, más allá de los zorrocotrocos de turno, llegó a protestar por ello, pero en ciertos "marxismos leninismos" los hay y como el dinero se repartió con la clase obrera, ahora protestan con la retórica de la derecha.
Continuamos con lo que nos dicen; "Tras la Reforma Laboral de la ministra Yolanda Díaz, una reforma que ha tenido el apoyo de la propia patronal y de la fundación FAES de Aznar, los despidos por no superar el periodo de prueba se han multiplicado por 9, convirtiéndose de esta forma los periodos de prueba en los nuevos contratos temporales, esos con los que supuestamente iba a acabar esta reforma. Además, en los 9 primeros meses de 2022, se firmaron 5,2 millones de contratos 'indefinidos', de los cuales 3 millones se rescindieron durante ese mismo periodo, aumentando los fijos discontinuos un 723%" Sinceramente camaradas, la subjetividad y los celos os tienen comido el cerebro. Ni la patronal, ni Aznar, mostraron apoyo en ningún momento a la reforma laboral y si por ceguera política no visteis, que la estrategia jugada por la patronal y el PP de la mano de los neoliberales del PSOE del gobierno, pasó por ampliar la comisión negociadora y asumir el PSOE la dirección de la negociación, dirigiéndola a desvirtuar lo máximo el acuerdo de investidura, pero sin romperlo en un frente con la patronal, situando con el apoyo de los medios de comunicación, de que el éxito de Yolanda Díaz estaba en si se revocaba el grueso de la reforma de Rajoy, pero ni Unidas Podemos ni los sindicatos cayeron en la trampa, ni entraron de frente contra esa campaña mediática, pero lanzaron un órdago desde el gobierno a la derecha del gobierno, al PP y patronal: el cambio del grueso de la reforma de Rajoy por la anulación de los contratos de obras y servicios del PSOE de 1994 de Felipe González y quien no entienda de sindicalismo, que se vaya a un sindicato a aprender. Yolanda Díaz como abogada laboralista y las cúpulas de CCOO y UGT lo entendieron bien, porque anulaba toda la base de la reforma de Rajoy. Pero la derecha de la patronal, el PP, neoliberales del PSOE y estos "marxistas leninistas" ganaron, porque el grueso de la reforma de Rajoy se mantuvo, pero sin entender que la contratación eventual quedaba regulada, que la subcontratación por otras empresas quedaba sin valor al regirse por Ley, por el convenio colectivo o de la empresa madre y que la negociación colectiva había que hacerla si o sí. Pero para entender las necesidades reales de la clase obrera, hay que hacer sindicalismo.
Pero tan grave o más, es echar la culpa al gobierno progresista, de las debilidades del sindicalismo de clase, inexistente en la mayoría de empresas y sectores laborales. Que las empresas contraten y despidan durante el periodo de prueba como costumbre o cualquier otra ilegalidad, solo significa, que la norma laboral está por delante de la conciencia del trabajador, porque legalmente solo él puede denunciar el abuso o la ilegalidad en su contratación, pero también pasa por delante de los sindicatos, porque estos problemas se deben encarar desde el comité de empresa o su representante sindical y si no se arregla, con las pertinentes denuncias a inspección de trabajo se debe solucionar el problema y de paso politizamos mediante la denuncia pública y la movilización. Camaradas, creo que vuestra comprensión mecanicista y subjetiva de la realidad que vivimos, no os permite entender que toda la debilidad del movimiento obrero por mucha culpa que tenga la burocracia sindical, el problema es de debilidad nuestra y que solo, la intervención de los comunistas y revolucionarios en el movimiento obrero sindicalizado, concienciándolo, politizándolo y organizándolo, podremos superar todas las debilidades. Cuando echamos la culpa de nuestros errores y debilidades a los de afuera, incluidas nuestras responsabilidades, nos quita credibilidad. Dejo estas notas de por donde pasa hoy el duro trabajo de los comunistas y revolucionarios en el mundo sindical: Sindicalismo de clase y criminalización de la lucha sindical - la Duro Felguera como ejemplo
Poner un par de ejemplos más, para profundizar en dos cuestiones claves para los revolucionarios que los camaradas, por propia autoexclusión metodológica se niegan a reconocer. "A esto se suma que los salarios reales (contando con la inflación) han sufrido la mayor caída en los 40 últimos años, mientras que las empresas superan los beneficios que tenían ante del COVID. Esto ha llevado a que un 44,9% de los españoles viva hoy en día al límite de la pobreza y que un 21% no llegue a fin de mes" Dando por cierto los datos de este medio de comunicación burgués qué es que los camaradas no entienden ni diferencian el estado capitalista del socialista? Aquí se vive en una confrontación de la lucha de clases directa, del tú a tú con la patronal, la banca y los gobiernos, incluidos reformistas, pero como personas inteligentes, diferenciamos entre los distintos sectores o tendencias políticas de la derecha y de los reformistas, sobre la base del programa, las alianzas y la táctica y si no tenemos fuertes sindicatos de clase que nos representen, ni un partido obrero como referente político, los camaradas que quieren con esta correlación de fuerzas ¿qué la lucha de clases la vaya ganando la clase trabajadora? Ah... pero es que nuestros revolucionarios, lo que quieren es que este gobierno progresista, resuelva todos los problemas que crea el sistema capitalista, igual que el gobierno burocratizado soviético hizo con su clase trabajadora, al ser ellos el partido, mejor dicho su Buró Político, órgano actual donde se decide lo fundamental de las decisiones políticas de estas organizaciones "marxistas leninistas", los únicos que representan orgánicamente a la clase obrera y al pueblo y nunca el soberano por sí mismo. No camaradas, así no, aprendan algo sobre la base de un programa que permita unas alianzas con otras fuerzas del pueblo y una táctica revolucionaria que sume unidad y organicidad en la unidad popular; si no, no hay revolución.
Termino por no alargar el escrito con el tema del mínimo vital, hecho fábula por los antisistema de la derecha y la izquierda rosca; "Una de las medidas estrella del gobierno de cara a la galería, el Ingreso Mínimo Vital, ha demostrado no ser más que una medida propagandística, denegándose la mayoría de solicitudes y poniendo todo tipo de trabas a quienes pretenden acceder a ella" y se quedan tan panchos con esta afirmación, sin decir quienes son los responsables de tamaño desacato, que tanto daño está haciendo a la clase obrera más necesitada. Deciros, que esta propuesta necesaria en el cien por cien por su inmediatez, sigue fracasando por dos motivos principales; el primero por la bisoñez de pensar que una ley nacional por el hecho de legislarla, el grueso de las estructuras del estado estaban obligadas en su cumplimiento. Craso error en un estado descentralizado, donde éste no ha mantenido sus competencias y aquellas comunidades autónomas donde gobierna la derecha del PP, nacionalistas de derechas varios o la derecha neoliberal del PSOE, o sea todas, que son las que tienen regladas las leyes, junto con los ayuntamientos del mismo pelaje de derechas extremas, nacionalistas de derechas y PSOE de derechas, que son mayoritariamente quienes gestionan las ayudas, fueron quienes la boicotearon porque se opusieron desde el principio y porque el estado, en el sentido de órgano superior de todas sus estructuras, se ha quedado sin competencias ni poder, por lo menos por parte del gobierno, de las fuerzas políticas no herederas del franquismo.
Y esto, que debiera ser de crítica frontal contra todas las derechas liberales por su alma depravada, egoísta y esquilmadora del erario público, es el argumento de este "marxismo leninismo" para la critica al gobierno, el único que avanzó algo en lo social en cincuenta años. Pero, porqué no ejerce la crítica concreta en política internacional, europea, económica, de libertades, de memoria histórica o de la recuperación de las competencias del estado en todo el ámbito nacional, para lograr políticas de igualdad en todas las comunidades del estado de bienestar perdido, que son las fundamentales para los intereses de las clases populares. Quizás no lo hacen porque así no tendrían el eco que se merecen entre los suyos o porque, coincidiendo con los burgueses y neoliberales en las identidades nacionales, crean otros pueblos al que subordinan los intereses de la clase trabajadora, utilizando la crítica del burgués para dividir a la clase obrera y al pueblo español y si se rompe el Estado, mejor.