Recientemente se realizó en Colombia el VIII Congreso de la Unión Patriótica que tenía dentro de sus objetivos definir la postura frente al proyecto del partido único o unitario para presentarse a las elecciones parlamentarias y presidenciales del 2026. La ley electoral establece que no podrán presentarse movimientos de convergencia que en las elecciones del 2022 hayan alcanzado el 15% o más del porcentaje electoral. El Pacto Histórico (PH) superó ampliamente este margen, por lo que los partidos que lo integran deberían renunciar a sus personerías jurídicas y cobijarse bajo una única, en un solo nuevo partido. El Pacto Histórico pasaría a registrarse como partido y no como convergencia de partidos.
El Congreso de la Unión Patriótica aprobó ser parte del nuevo partido unitario, con las consideraciones esbozadas en la Declaración política que contemplan que la base de la continuidad del PH debe ser la precisión y refrendación de un acuerdo programático que incorpore, además de los pilares que dieron origen al plan del gobierno de Gustavo Petro, una formulación más elaborada y profunda de transformación democrática de la sociedad colombiana en coherencia con un nuevo poder. Resaltando el respeto por el derecho a la vida en toda su extensión; el compromiso con el Acuerdo Final de paz firmado con las FARC y el proyecto de la Paz Total; una nueva democracia política y social donde se fortalezcan los territorios con directa participación popular; una respuesta social a la desigualdad, a la pobreza, al desempleo, a la precarización del trabajo, a los derechos inalienables de los ciudadanos y ciudadanas, y a la búsqueda de un nuevo modelo de desarrollo productivo.
Frente a los aspectos organizativos y estatutarios señaló que debe ser una organización que “respete e integre la pluralidad de expresiones y tradiciones organizativas, resistencias y luchas sociales y políticas del pueblo. Que evite la homogenización impuesta, el caudillismo y las prácticas clientelares y corruptas. Que reconozca los territorios, las causas y luchas populares, y abierta a la participación de ciudadanos sin partido u organización. Con una estructura que garantice derechos y deberes, propios de una militancia con un proyecto colectivo de cambio. Un movimiento político capaz de trascender el campo electoral y asumirse también como fuerza dirigente de la nación colombiana, acompañando desde la base las conquistas democráticas que el pueblo proponga”.
Enfatizando que, “se necesitan reglas claras en los procedimientos de elección democrática de órganos de dirección, gobierno y control a todos los niveles del movimiento, en particular la selección democrática, transparente y en equidad de las candidaturas oficiales a los diversos cargos de elección popular. Un acuerdo democrático que conduzca a que el Pacto Histórico se transforme en una organización unitaria respetando la diversidad”.
Similar decisión han tomado otros partidos del PH como Colombia Humana, el Polo Democrático y el Partido Comunista, quien teniendo personería jurídica y siendo parte integrante de la UP, decidió en su comité central la disposición a renunciar a ella para contribuir al proceso unitario.
Para la UP y el PCC la renuncia a la personería jurídica y su integración en el partido unitario no significa de ninguna manera la disolución de sus estructuras organizativas, ni sus idearios programáticos, ideológicos o estatutarios, ni su actuación como fuerzas políticas con proyectos políticos estratégicos históricamente definidos.
