domingo, 1 de septiembre de 2024

PEPE ESCOBAR. La ingenuidad del creador de Telegram puede llevarlo a la cárcel


Septiembre del 2024

Multitudes en todas partes se maravillan de cómo Pavel Durov, un globalista tecnológico narcisista, puede ser tan ingenuo como para creer que el totalitarismo liberal alguna vez protegería su libertad












La teleserie de Pavel Durov es un regalo que seguirá dando frutos durante mucho tiempo. De eso se trata la guerra de información candente. Así que vamos a intentar atar algunos cabos sueltos.

Un analista ruso de alto nivel sostiene que el arresto de Durov está relacionado con “las protestas antifrancesas en sus antiguas colonias y su obligada retirada de su esfera de influencia, donde se utilizaba la infraestructura de Telegram para impulsar movimientos anticoloniales y antimacronistas”.

A esto hay que añadir un “intento de influir en las narrativas sobre Ucrania tanto en el ámbito mediático ruso como en el internacional, que depende en gran medida de la infraestructura de Telegram”.

De hecho, París está desesperado por ganar relevancia en lo que se refiere a operaciones psicológicas y guerra de influencia en Ucrania.

Sin embargo, como señala el analista, los franceses no tienen los medios tecnológicos para lograrlo. Por lo tanto, esto pudo haber llevado a Macron a “ejercer una campaña de presión personal contra el propio Durov”

Las autoridades francesas deben estar bastante desesperadas por intentar mantener la cabeza en el juego de la política global. Y Telegram hoy es política global”.

París estaba esperando una gran oportunidad. 

Cuando el piloto del jet privado Embraer de Durov presentó su plan de vuelo, no había ninguna orden de arresto en Francia. Sólo cuando el jet estaba en camino a Le Bourget, París presentó la orden a toda prisa. Durov no tenía ni idea de lo que estaba pasando.

En pocas palabras: Paris recibió un aviso que Durov iba a volar a Francia (podría haber sido a través de la novia de del CEO de Telegram) y preparó la trampa en un instante.

Una eminencia en la cárcel

Existe el mito de que el FSB en el pasado le pidió a Durov las claves de cifrado de Telegram. Falso. El FSB quería que Telegram brindara acceso prioritario a las investigaciones de delitos graves, caso por caso. Esto es una diferencia enorme en comparación con lo que el gobierno de los EE. UU. hace con Meta o Twitter/X a través de unas puertas traseras totalmente abiertas para sus servicios de inteligencia.

Sin embargo, Durov se emborrachó con la propaganda de “libertad y democracia” de la OTAN, rechazó a Rusia y se fue. Y eso nos lleva al presidente Putin.

Putin tenía mejores cosas que hacer que reunirse con Durov en Bakú, y el Kremlin ha negado públicamente la reunión. Durov estaba de gira por Asia Central y el Cáucaso y se cruzaron en Azerbaiyán….Hay una cosa que Putin jamás tolera: la traición a Rusia. Y eso se aplica a la carta a Durov.

Cuando Durov se fue a Estados Unidos, los norteamericanos, como era de esperar, le exigieron que utilizara las puertas traseras de Telegram para vigilar a todo el mundo. Así que se instaló en Dubai y más tarde solicitó la ciudadanía francesa.

Durov se nacionalizó francés hace apenas tres años –es decir, antes de la puesta en marcha del SMO– gracias a un programa especial de “extranjeros ilustres” creado por el Ministerio de Asuntos Exteriores. Son muy pocos los que pueden optar a él; sólo los “extranjeros francófonos que contribuyan con su actuación ilustre a la influencia de Francia y a la prosperidad de sus relaciones económicas internacionales”.

Bueno, ninguna “acción eminente” fue suficiente para mantener a Durov alejado de la cárcel francesa.

Cómo conseguir esas llaves

La Comisión Europea (CE) en Bruselas puede ser descrita sumariamente como un grupo notorio de eurocratas cobardes y/o psicópatas que elogian alegremente “nuestros valores”. Y como era de esperar, la CE se niega a hacer comentarios sobre el arresto de Durov, diciendo que es una «investigación nacional».

Una «investigación» que parece haber sido «alentada» por el Estado profundo estadounidense, llevada a cabo desde el 8 de julio por la policía vasalla de Macron, en beneficio de la OTAN y… de la propia Comisión Europea.

Los cargos contra Durov revelados por el Fiscal de la República de Francia deberían ser destruidos fácilmente en los tribunales por cualquier equipo legal de primera.

En esencia, las acusaciones son que el propio Durov es responsable de quienes abusan de Telegram. Es «cómplice» de todos los delitos bajo el sol, desde fraude organizado hasta tráfico de drogas, pasando por una vaga acusación de proporcionar servicios encriptados sin una «declaración certificada».

Las acusaciones sobre la falta de moderación de Telegram son falsas. Por ejemplo, Telegram censura activamente la correspondencia dentro de la UE a petición de la Comisión Europea; los residentes de la UE no pueden acceder a innumerables chats y canales.

Además, a Telegram no le preocupa la reciente y radical ley neoorwelliana de la UE contra las megaredes sociales, porque alberga a menos de 45 millones de usuarios europeos al día.

Centrémonos ahora en el motivo.

El actual eurogulag liberal-totalitario, es un bloque de poder que no tiene acceso al contenido de Telegram.

Telegram mantiene sus propios servidores en todo el mundo y el enrutamiento se realiza a través de Amazon, Cloudfare y Google. Desde el comienzo de Telegram, los servicios de inteligencia y vigilancia de Estados Unidos tienen los medios para bloquearlo fácilmente, si así lo desean.

En la UE el juego es diferente. Así que aquí tenemos a Bruselas, a través de París, intentando adquirir al menos cierto control sobre Telegram –y las redes sociales en general. Aquí falta recordatorio (que debería catalogarse como vergonzante para Bruselas): Europa no tiene redes sociales propias.

De ahí las constantes amenazas contra Twitter/X y la neoorwelliana Ley de Servicios Digitales sobre la responsabilidad de las plataformas en materia de contenidos, que se aplica a todas ellas, y no solo a Telegram.

La UE y Francia quieren desesperadamente lo que la potencia hegemónica ya tiene, en masa: acceso a todo, aquí y ahora, sin documentación legal alguna.

La pregunta clave ahora es: ¿lo conseguirán presionando a Pavel Durov ? No hay pruebas que el tenga las claves de cifrado de Telegram. ¿Y si se equivocaron de persona?

Nikolai Durov, el hermano ultradiscreto de Pavels, es el principal genio de la arquitectura de Telegram: maestro en matemáticas, dos doctorados, medalla de oro en la Olimpiada Internacional de Matemáticas.

Los franceses preferirían llegar a un acuerdo (de ahí el extenso interrogatorio), pero eso implicaría quebrar a Pavel para que influya en Nikolai y le entregue esas legendarias llaves.

¿Por qué ahora? ¿Y quién se beneficia?

Como era de esperar, el interrogatorio de Durov se desarrolla sin transparencia alguna. Francia tiene una policía secreta, propensa al silencio absoluto sobre asuntos serios, con una lentitud que pone nervioso a todo investigado y con raras declaraciones formales. Todo se reduce a procedimientos, y a una burocracia paralizante.

Sin embargo, la burocracia francesa puede haber dado una valiosa pista sobre lo que realmente les molesta. Sencillamente no pueden aceptar que alguien utilice –o proporcione– medios de “ofuscación” en materia de transacciones financieras, eludiendo la censura y la vigilancia.

Por lo tanto, esto puede ir mucho más allá de la obsesión por obtener algunas o todas las claves de cifrado de Telegram. El aparato burocrático francés quiere hacer todo lo posible para eliminar cualquier posibilidad de evasión, al tiempo que conserva el poder de castigar a cualquiera.

Si la saga continúa y conduce a un juicio que puede llevar a una condena de 20 años de prisión , ante esta posibilidad: ¿ Durov no se doblegará ante el aparato burocrático y que seguirá siendo “cómplice”?
¿Renunciará a la fama y al glamour para terminar recibiendo a cambio una baguette rancia todos los días en una cárcel francesa?

Dos preguntas más son inevitables: ¿por qué ahora? Porque la UE lo necesita urgentemente…. ¿Y quién se beneficia? Los principales candidatos son el “espíritu de cuerpo” de la  burocracia francesa y sus conexiones con los oligarcas franco-europeos.

La envidia también está en juego. Durov es ruso, un outsider, y su Telegram –con mil millones de usuarios en todo el mundo– es un éxito rotundo.

En el futuro puede pasar cualquier cosa, incluido el bloqueo de Telegram en Francia y la UE. A la mayoría global no podría importarle menos. Mientras tanto, multitudes se maravillan de cómo un globalista tecnológico narcisista puede ser tan ingenuo como para creer que el totalitarismo liberal alguna vez protegería su libertad.

 

(Observatorio Crisis)