La formación del gobierno asturiano, parte de la apuesta por la confluencia desde el programa y la regeneración democrática entre Podemos, IU, EQUO y los movimientos sociales para las generales de otoño, como instrumento para derrotar las políticas de austeridad, recortes y privatizaciones del capital financiero español y el bipartidismo PP-PSOE.
Pero la confluencia de la izquierda solo reforzará la unidad popular, si se hace desde un programa del pueblo para el pueblo y desde la regeneración democrática, basada en un proceso democrático y con un funcionamiento abierto y asambleario, de lo contrario mañana restará más que sumará.
El grueso de la estrategia de los comunistas y revolucionarios que apostamos por la confluencia posible de aquí a las elecciones generales, debemos situar con claridad en este debate, que lo fundamental es conseguir que este movimiento continúe aumentando y vaya situando en cada batalla electoral, una cuña de tamaño superior en la fractura del bipartidismo electoral de la oligarquía financiera imperialista española, quebrar esta estrategia bipartidista es quebrar el pago de la deuda de la banca privada y las políticas de austeridad y recortes para las clases trabajadoras.
Situar como sitúa defensivamente la dirección de IU de Asturias, la confluencia con Podemos con el formato de la unidad de la izquierda en continuidad con los pactos con el PSOE más Podemos, no significa ningún avance para la confluencia de la izquierda ni de la unidad popular, ni ofrece ninguna garantía democrática ni de regeneración política, es más de lo mismo, es la trampa caza novatos para la casta. En sí es la táctica unitaria de PSOE, IU y PP con respecto a Podemos, insisten una y otra vez en que los pactos de izquierdas son así, con buenos sueldos para los políticos del sistema, como la Comisión europea con respecto a Syriza y las clases trabajadoras, austeridad o nada.
La confluencia no puede basarse en un acuerdo de cúpulas para salvar los muebles de la vieja guardia del sistema adherida al viejo PCE y al aparato de IU, corrompida no solo ideológicamente, como lo demuestran los múltiples casos de corrupción donde participaron como en BANKIA o se beneficiaron de las financiaciones institucionales, mientras consentían las corrupciones como en Asturies y Andalucía, coparticipando de las políticas de austeridad y recortes en los gobiernos autonómicos.
Como una imagen vale más que cien palabras, vean a la cúpula del PSOE asturiano con la patronal, inaugurando el festín del Puerto del Musel, asunto en el que actualmente están siendo investigados judicialmente. El problema que tiene IU, es que absolutamente todas las infraestructuras asturianas fruto del grandonismo y la especulación, salieron adelante, no solo con el apoyo de IU, sino también con su aplauso, como la variante de Pajares para el AVE, el metrotren de Gijón o el susodicho Muselón, que la principal característica explicada por Intervención del Estado por los estudios de movimientos de carga, es que era completamente innecesaria su ampliación, que se hizo para la especulación y expolio de fondos públicos.
Durante todos esos años la dirección de IU con Gaspar Llamazares al frente, “falando” todos ellos en asturiano en aquella época, participaron del “gobierno de izquierdas” con consejeros y directores. Tiene la actual cúpula de IU, con Llamazares y Aurelio Martín al frente de la política institucional, toda la responsabilidad política por taparse la boca, orejas y ojos ante la corrupción que muchos ya estaban denunciando antes del inicio de las obras, por eso, ante ese “historial de izquierdas” es imposible que la confluencia de la izquierda pase por tragar el sapo, de los que intelectualmente y de hecho por los sueldos y subvenciones que como grupo parlamentario recibían, participaron del festín.
El problema de la prepotencia interesada con la que estos dos dirigentes plantean su “gobierno de izquierdas” entre el PSOE, Podemos e IU, no está en que si “uno se vuelve gilipollas en el parlamento” como dice Emilio León en plan genérico y burlón o como dice Gaspar Llamazares “a que ya se entre gilipollas” en plan borde y grosero directo, el problema está en que el único requisito programático, que IU exige para la formación de ese “gobierno de izquierdas” es que sus consejeros tengan sueldos de 60.000 euros anuales, decenas de asesores con otros supersueldos y millonarias subvenciones a los grupos parlamentarios, todo esto más dietas para seguir siendo ciegos, sordos y mudos.
Esto es lo que la dirección asturiana de IU ha logrado con su política de “unidad de la izquierda” incluso ha falseado el sistema democrático interno, convocando un referéndum donde solo estaban invitados a intervenir los que salieron públicamente fotografiados, donde a vista del resultado uno de ellos votó en blanco. En todo esto, ni los objetivos ni las formas son de izquierdas ni democráticas, son patéticas.
Si esta exigencia fuera de izquierda, como un sueldo digno para hacer política trabajadores y banqueros y la de contratar los asesores como política de creación de empleo, por qué motivo no informasteis de ello durante la campaña electoral y pedisteis el voto a las clases trabajadoras, informando de que el objetivo era lograr sueldos millonarios para los diputados/as, la consigna bien pudiera haber sido “si nosotros lo logramos vosotros también podéis”. La propuesta de Podemos de 1950 € al mes por 14 pagas al año más las dietas y teléfono gratis, dan 30.000 € al año más o menos ¿Dónde está la miseria en esta paga? Rechazar esto como miserias, sí es de pijos.
Los comunistas y revolucionarios debemos explicar con paciencia, que la confluencia de las fuerzas populares solo puede triunfar y tener utilidad para el pueblo, cuando se da entre fuerzas del pueblo que han roto con el sistema instaurado desde la transición democrática, sistema basado en políticas de austeridad, recortes y privatizaciones para las clases trabajadoras y sueldos y subvenciones millonarias a los políticos y partidos del sistema para pagar la deuda de la banca. Los atajos tienen un alto precio y las capas populares exigen coherencia y consecuencia con los programas del pueblo para el pueblo.
Posiblemente este viernes 5 de julio, en la elección al presidente del parlamento asturiano el PSOE vuelva a gobernar con el apoyo de la cúpula de IU, incluso es posible que consigan consejerías y directores, porque en el asunto del Muselón, están implicados todos los miembros del consejo de administración, en el cual participaba además de la patronal, PP, FORO y el PSOE, Izquierda Unida y los sindicatos mayoritarios.
Con estos mimbres, la confluencia con las bases de IU para las generales, bien merece la pena de pagar el precio de esperar a la próxima, solo esperamos que el grueso de la afiliación y la militancia de IU, exija responsabilidades a los responsables de que la derecha gobierne en Gijón y los corruptos de la cúpula del PSOE en el gobierno de Asturies, solo porque Aurelio Martín y Gaspar Llamazares prefirieron el “pacto de izquierdas” como plato de lentejas que es y a lo único que llegan.
Los comunistas y revolucionarios, debemos avanzar y consolidar posiciones de clase en el movimiento por la confluencia, construir su ala de izquierdas y Grecia debe ser un referente de estudio continuo para nosotros, por eso, tiene razón Podemos cuando dice que sale a ganar, pero si no es así, por lo menos que se demuestre, que la posición del PSOE, con el apoyo de la muletilla de la cúpula actual de IU, de buscar acuerdos de gobiernos autonómicos y locales con Podemos, es una posición electoralista de cara a las generales para no perder más votos por la izquierda.
Pero si el bipartidismo se rompe de nuevo en las elecciones generales de noviembre y la derecha del PP pierde, veremos la verdadera esencia neoliberal del PSOE, buscando el gobierno de concentración nacional con el PP, para seguir desarrollando políticas de austeridad, recortes y privatizaciones, para pagar la deuda privada empresarial y las guerras de la OTAN; que para eso la banca paga.
Alonso Gallardo militante comunista y de la Corriente Sindical de Izquierda Julio de 2015
