martes, 10 de marzo de 2015

RESOLUCIÓN SOBRE LA CONFLUENCIA ELECTORAL EN EL CAMPO POPULAR


RESOLUCIÓN SOBRE LA CONFLUENCIA ELECTORAL  EN EL CAMPO POPULAR

 

1.- Llevamos años en los que los gobiernos de la oligarquía han utilizado las llamadas políticas de austeridad y de recortes, para mermar los derechos económicos, laborales, sociales y democráticos de los trabajadores y de todas las capas populares. Llevamos años en la crisis del sistema, en los que se desarrollan políticas en contra del pueblo con el ánimo de que los capitalistas mantengan o aumenten sus beneficios. De esta manera tenemos que sufrir el paro masivo, la privatización de los servicios públicos, los recortes salariares, los ERES, el paro y la precariedad, la merma de las pensiones. Una parte mayoritaria del pueblo tiene que padecer el sufrimiento de no poder cubrir ni tan siquiera sus necesidades vitales: trabajo, vivienda, alimentación, agua, electricidad, sanidad, educación,… Los gobiernos desarrollan solamente leyes antidemocráticas en contra de los intereses de la mayoría: leyes laborales, impositivas, de prioridad en el pago de la deuda, represivas y mordazas de la protesta social, de todo tipo de recortes y privatizaciones de lo público. Es una situación inasumible.

 

2.-  Con la crisis y las políticas dirigidas por los gobiernos de la oligarquía, en connivencia con la troika, se ha producido una crisis política. En ésta, una gran parte de las capas populares ya no se sienten representadas por los grandes partidos de la oligarquía creados durante la transición y se vuelven hacia las organizaciones políticas populares. El pueblo quiere un cambio, lucha contra la oligarquía, contra los recortes, por la democracia. Quiere un cambio político que conforme una nueva mayoría social para poder revertir todos los golpes contra sus intereses que les han sido arrebatados a lo largo de los años. Se impone el grito de la unidad popular, todavía solamente dentro de las instituciones existentes del sistema capitalista. Las organizaciones que hoy ostentan la mayoría en la representación de los intereses inmediatos del pueblo llaman a la unidad popular, pero cada uno dentro de sus fortalezas.

 

3.- Pero no podemos olvidar, que la unidad popular no se consigue por decreto de las organizaciones políticas que confluyan en unas elecciones, ni es patrimonio de ninguna organización en concreto. La unidad popular es la unión de las clases o capas sociales explotadas y oprimidas por el sistema social que luchan en comunidad de intereses contra los opresores. La unidad popular se forja en la lucha continuada y unificada en los campos políticos, ideológicos y económicos. Las elecciones son solamente una parte de la lucha por conseguir esta unidad frente a la oligarquía. En el momento actual son un medio que genera ilusiones de cambio en el pueblo y ciertamente, pueden ayudar a debilitar a la oligarquía y a sacar a la luz las contradicciones de clases.

 

4.- Estas ilusiones, debidas a las necesidades urgentes que tiene el pueblo, exigen de las organizaciones políticas y sociales que tienen la mayoría popular, apostar por la confluencia de cara a los procesos electorales venideros. Los movimientos, la toma de posiciones y maniobras que se están desarrollando en nuestra comunidad autónoma, tendrían que confluir en candidaturas unitarias, pero parece que se están conformando, en lugar de la unidad, la división y la confrontación en un todos contra todos, como si el enemigo estuviese en el mismo campo popular y democrático, en lugar de en el campo de la oligarquía, del gran capital y de sus partidos políticos. El pueblo quiere la unidad de sus organizaciones y es necesario el fortalecimiento de las opciones unitarias y democráticas que actualmente lo representan.

 

 

5.- De cualquier manera, las elecciones están a la vuelta de la esquina y pueden significar un golpe a los intereses de la oligarquía, si las fuerzas políticas que hoy reclaman reformas, para un cambio democratizador del sistema actual en beneficio popular para acabar con la austeridad, la troika, los recortes sociales, laborales o de libertades, logran confluir en candidaturas unitarias a nivel municipal y autonómico. Si no es así, significará que todavía no se dan las mejores condiciones para esa unidad electoral, saliendo perjudicados los intereses inmediatos de las capas populares que reclaman un cambio político democrático.

 

6.- Desde la Mesa de Coordinación Comunista de Asturias, conformada por la Plataforma Comunista y el Partido del Trabajo Democrático, apoyaremos estos procesos concretos de confluencia electoral, aunque dando cuenta, que para conseguir la unidad popular y un proceso de transformación social real, no es suficiente ganar los gobiernos, gestionar las instituciones o reformar el sistema. Para alcanzar la verdadera unidad popular es necesaria la movilización de masas unificada y organizada con unos objetivos políticos comunes de transformación social, es necesario que la participación de la clase obrera como sujeto político fundamental, desarrolle su independencia política y no siga a expensas de otras capas sociales. Nuestro apoyo y participación en la campaña electoral, no nos excluirá de nuestro objetivo fundamental de la línea política de masas, de que la clase obrera reconstruya su proyecto político: el Partido Comunista.

 

                                                                                                                           

MESA DE COORDINACIÓN COMUNISTA

Asturias, febrero 2015